Ateneo de Córdoba. Calle Rodríguez Sánchez, número 7 (Hermandades del Trabajo).
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Nueva Junta Junta Directiva del Ateneo de Córdoba
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Jueves 11 de abril. Conferencia de DESIDERIO VAQUERIZO." LOS ORIGENES DE CÓRDOBA". (Presenta J.L.G.C).
Finales de abril, primera semana de mayo. Proyección del documental "MONTE HORQUERA" de FERNANDO PENCO, galardonado en diversos Festivales internacionales (Italia, India, Holanda etc,)
Lunes 11 de Mayo. Conferencia de MANUEL VACAS." LA GUERRA CIVIL EN EL NORTE DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA.LAS BATALLAS DE POZOBLANCO Y PEÑARROYA- VALSEQUILLO". (Presenta Antonio BARRAGÁN).Todos los actos en la Sede del Ateneo.
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XI Premio de Relato Rafael Mir.
XXXIX Premio de Poesía Juan Bernier.
IX Premio Agustín Gómez de Flamenco Ateneo de Córdoba.
Fallo de las Fiambreras de Plata 2023, relación de homenajeados aquí.
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Abraham ben Meir ibn Ezra
El rabí Abraham ben Meir ibn Ezra, conocido también como Aben Ezra o Esra, el Sabio, el Grande, el Admirable, fue un destacado intelectual judío que nació en el año 1092 en Tudela en la actual provincia de Navarra, que perteneció al emirato de Zaragoza y al reino de Zaragoza o Taifa de Zaragoza posterior y murió en Calahorra en 1167.
Hombre polifacético, destacó en poesía, filosofía, gramática, cábala, medicina, matemática y astronomía. Ibn Ezra fue además un notable viajero; dejó al-Ándalus hacia 1140 y viajó por el norte de África, Egipto, Palestina, Italia, Francia e Inglaterra antes de regresar a la península.
En el año 1934, se decidió en su honor llamarle «Abenezra» a un cráter de impacto lunar.
Vida
Nació en Tudela en 1092, aunque otros consideran 1089. Es en esta ciudad donde permanecerá hasta su juventud. Ubicado en un entorno judío, recibirá allí una enseñanza de los diferentes ámbitos de la cultura judía. Antes de 1115, cuando Alfonso I El batallador, rey de Aragón, tomó Tudela, Ibn Ezra partió de su localidad, en un errante viajar que le llevaría, primeramente, por diversas zonas de la península, y posteriormente a lugares más alejados.
Pasó por Toledo, por el cual avanzó hacia el sur, donde visitó Córdoba, Lucena, Granada y Sevilla, conociendo a varios ilustres pensadores judíos con los que mantendría relación, y logrando ocupar algún cargo relevante. Especial relación fue la que tuvo, en Granada, con Yehudah Halevi Ben Samuel Halevi.
Más tarde viajaría Ibn Ezra por el norte de África, donde fue testigo del gobierno almohade. También presenciaría las matanzas de judíos que se desarrollarían en Marruecos y al-Ándalus, así cómo la destrucción de algunas comunidades.
En 1140 (o 1139) se dirigió a Roma, pasando por la península. En bastantes de sus obras refleja las desdichas que le ocurrieron en su paso por la península, y el dolor que sintió al abandonarla. Seguramente fue debido a los acontecimientos que recaían sobre los judíos que tuviera que alejarse del territorio español; como les pasó a otros ilustres judíos (por ejemplo, Yehuda ben Samuel Halevi, que marchó a Oriente, acompañado, precisamente de un hijo de Ibn Ezra).
Permaneció en Roma alrededor de cinco años, y es allí donde redactó los comentarios al libro del Eclesiastés y al de Job. Después se retiró a Lucca, donde continuó dedicándose a la exégesis del libro de Isaías y al Pentateuco. Tras pasar por Pisa, se instaló en Mantua, donde en 1146 escribió su obra considerada hoy más relevante sobre gramática de la lengua hebrea, el Sefer Sahot. Más adelante lo encontramos en Verona, donde escribiría el Sefer ha-'Ibbur, obra sobre el calendario, el Sefer ha-Mispar, sobre aritmética, y el Safah Berurah, otro tratado gramatical de cierta consideración. Se marchó de Italia hacia los años 1147-1148.
Pasó a Provenza, donde se estableció en Béziers. Aquí escribiría el Sefer ha-Shem. Los viajes que realizó por Francia resultaron muy fructíferos, pues durante los cuales retomó su actividad exegética con el Éxodo, el libro de Daniel, los Salmos, los libros de los Profetas Menores, el libro de Ester, y el Cantar de los Cantares. Fue testigo en esta ocasión de la Segunda Cruzada. Más tarde se quedaría en Ruán, dedicándose a traducir obras árabes.
De Ruán se trasladó a Inglaterra en 1158. Durante su estancia escribiría el Sefer Yesod Mora Vesod Atora, que trata sobre los mandamientos de la Biblia, y el Iggeret Shabbat, sobre el Shabat. Se desconoce cuánto tiempo permaneció en Inglaterra. Después volvería a Narbona.
Falleció hacia los años 1165-1167, de nuevo en la península, en Calahorra; según otros, en Rodas.
Obra
Ibn Ezra fue uno de los más destacados literatos hebreos del medievo, y sus comentarios al Tanaj se distinguen por su erudición y originalidad; su empleo de métodos gramaticales para la exégesis del sentido del texto preludia la actividad de la crítica textual moderna. Además del comentario completo al Tanaj recogido en el Sefer ha-Yashar, publicado poco antes de su muerte, comentó los Salmos y varios de los libros de los profetas. Llegaron a imprimirse sus Comentarios sobre los Libros Santos (Venecia, 1526) en 24 libros, que fueron muy leídos y reimpresos posteriormente en Constantinopla, París y Utrecht, aunque la parte dedicada al Pentateuco fue ya impresa en 1488 de manera independiente en Nápoles. Realizó también muchas obras sobre diversas materias, entre las que cabría señalar el primer intento de sistematización de la gramática hebrea.
Sus libros fueron muy leídos durante la Edad Media y son objeto de otros comentarios. Sus interpretaciones filosóficas revelan la influencia del platonismo. Otros escritos suyos hablan de temas tan diversos como las matemáticas, la astronomía, la medicina, la filosofía y la astronomía. También escribió poesía, tanto profana como religiosa, en un hebreo de gran belleza.
También fue reconocida su labor astronómica, que incluyó desde tablas de posiciones estelares conocidas como Luhot hasta un Sefer ha-'Ibbur sobre el calendario, el Keli ha-Nejoshet sobre el uso del astrolabio y la traducción de obras astrológicas de Mashallah. Al latín fueron vertidos sus Fundamenta tabularum astronomicarum (1154).
Escribió en hebreo poesía religiosa de carácter litúrgico, pero también profana de tema amoroso y burlesco, aunque se le tiene por un poeta bastante frío; sin embargo destaca su poema Delicias del rey, en que analiza en setenta y tres versos el juego del ajedrez.
Referencias
Notas
- Ficha del cráter lunar «Abenezra», Gazetteer of Planetary Nomenclature Enlace consulato el 29 de julio de 2009.
Bibliografía
- Gómez Aranda, Mariano (1994). El comentario de Abraham Ibn Ezra al libro del Eclesiastés. Madrid: CSIC.Contiene además de la traducción y la edición crítica, una introducción a Ibn Ezra y su obra.